3 HOMBRES CONFESARON EL ASESINATO DE LAS PRIMAS VIOLADAS EN LA INDIA
La Policía de Badaun, ciudad donde las jóvenes de 14 y 16 años fueron secuestradas y ahorcadas, informó que los tres principales sospechosos admitieron el crimen. "Están implicando a otros", afirmaron.
Tres de los sospechosos arrestados por la violación grupal y asesinato de dos adolescentes, cuyos cuerpos fueron encontrados colgados de un árbol en el norte de India, confesaron el crimen.
Los tres sospechosos son primos, se enfrentan a cargos por asesinato y violación y podrían ser condenados incluso a la pena de muerte. También fueron arrestados y despedidos dos policías por acusaciones de complicidad y falta de actuación en el caso.
"Los tres principales sospechosos confesaron el crimen. Uno de ellos dijo que conocía a las chicas, pero todavía ocultan detalles y están implicando a otros", dijo por teléfono un oficial de policía relacionado con las investigaciones.
La policía recopiló pruebas forenses y muestras de ADN de los sospechosos para realizar análisis. Además, está buscando a otros dos sospechosos, de los que está realizando retratos robot a partir de las descripciones de los detenidos, dijo un agente de policía local.
Las familias forman parte de la comunidad Dalit, de casta baja, que sufre discriminación en India. El padre de una de las víctimas dijo el viernes a la emisora NDTV que la policía local se negó a permitirle poner una queja cuando las niñas desaparecieron. Sus vidas podrían haberse salvado si la policía hubiera actuado a tiempo, aseguró.
El viernes otra joven de 17 años fue víctima de una violación en grupo en el distrito de Azamgarh, en el estado de Uttar Pradesh. Y a otra adolescente la prendieron fuego por una disputa sobre propiedades en el distrito de Basti. La joven sufre quemaduras en el 50 por ciento de su cuerpo, mientras que la policía arrestó a ocho personas. Los ataques a mujeres y la violencia sexual están en el foco de la atención pública especialmente desde la violación grupal y la muerte de una estudiante en un autobús en Nueva Delhi el 2012, que desató protestas multitudinarias.
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