Sentencian a 30 años de cárcel a un secuestrador
“¡Culpable!”. Gonzalo Flores Pumari fue condenado a 30 años de presidio el delito de secuestro por el tribunal de sentencia presidido por el juez Jaime Choquevillque que ayer por la tarde emitió la sentencia en primera instancia.
La audiencia de juicio oral contradictorio culminó ayer cuando los jueces ciudadanos y el juez técnico emitieron su voto de forma separada. Asimismo sentenciaron a un año y medio de cárcel a Wendy Carvajal Cuiza por el delito de encubrimiento. Ambos enjuiciados por el secuestro de una niña de ocho años deberán cumplir su sentencia en el penal de San Pedro, La Paz.
De acuerdo a los datos ventilados en el juicio, la niña Eldy (nombre ficticio) fue secuestrada el viernes 26 de noviembre de 2010 de la puerta de su casa cuando la misma fue introducida a la fuerza a un vehículo que huyo con rumbo desconocido.
Los ahora culpables pidieron un rescate de 40.000 Bolivianos caso contrario amenazaban con terminar con la vida de la pequeñita. Fueron momentos, sin duda alguna, de angustia y desesperación los que vivieron los padres de la menor.
Esa actividad ilícita ocurrió el viernes 26 de noviembre del pasado año a las 14:30 en un inmueble ubicado en la zona baja de la ciudad. El Potosí conoció del caso cuatro horas después del secuestro pero, para no obstaculizar el proceso de investigación, guardó reserva.
El hecho conmovió a los vecinos de la zona baja de la ciudad por cuanto en un barrio muy tranquilo ocurrió esa actividad ilícita que se la veía sólo en las cintas cinematográficas.
Ese día la niña tenía previsto asistir a una consulta con su odontólogo a la misma hora que se produjo el secuestro. Extrañamente a esa hora llegaron los sujetos al domicilio, tocaron la puerta y le dijeron a la niña que ellos le iban a llevar porque supuestamente su padre se les pidió.
Desde esa hora el paradero de la pequeñita era desconocido e incluso sus padres en su afán de desesperación hicieron notas para publicarlas en algunos medios de comunicación. Después de algunas horas cuando ya se había denunciado a la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc), el papá de Eldy recibió una llamada. Los secuestradores, en primera instancia, le pidieron 3.000 dólares. Posteriormente a esa llamada hubo otra al mismo teléfono, pero está vez pedían más de 5.000 dólares. El papá, un abogado que se dedica a la venta de maderas, accedió para salvar a su hija.
Toda esa supuesta negociación que los delincuentes habrían ejecutado con el papá de la niña, posteriormente fue de conocimiento del personal especializado de la Felcc. Los secuestradores dieron el lugar y hora donde iba a entregar el dinero. Horas después cuando se iba a realizar el rescate, extrañamente los secuestradores cambiaron el lugar: zona Tika Loma. Sin embargo, el personal encubierto de la Policía ya había rodeado la zona donde está la agencia de venta de Coca Cola.
El padre de Eldy acudió a la zona y dejó la bolsa de dinero donde le habían indicado los secuestradores, pero a cambio de ello en ese mismo instante la niña fue liberada cerca de su casa. Ese intercambio se produjo a plena luz del día, la pequeña Eldy estuvo secuestrada 21 horas aproximadamente antes de ser liberada.
La audiencia de juicio oral contradictorio culminó ayer cuando los jueces ciudadanos y el juez técnico emitieron su voto de forma separada. Asimismo sentenciaron a un año y medio de cárcel a Wendy Carvajal Cuiza por el delito de encubrimiento. Ambos enjuiciados por el secuestro de una niña de ocho años deberán cumplir su sentencia en el penal de San Pedro, La Paz.
De acuerdo a los datos ventilados en el juicio, la niña Eldy (nombre ficticio) fue secuestrada el viernes 26 de noviembre de 2010 de la puerta de su casa cuando la misma fue introducida a la fuerza a un vehículo que huyo con rumbo desconocido.
Los ahora culpables pidieron un rescate de 40.000 Bolivianos caso contrario amenazaban con terminar con la vida de la pequeñita. Fueron momentos, sin duda alguna, de angustia y desesperación los que vivieron los padres de la menor.
Esa actividad ilícita ocurrió el viernes 26 de noviembre del pasado año a las 14:30 en un inmueble ubicado en la zona baja de la ciudad. El Potosí conoció del caso cuatro horas después del secuestro pero, para no obstaculizar el proceso de investigación, guardó reserva.
El hecho conmovió a los vecinos de la zona baja de la ciudad por cuanto en un barrio muy tranquilo ocurrió esa actividad ilícita que se la veía sólo en las cintas cinematográficas.
Ese día la niña tenía previsto asistir a una consulta con su odontólogo a la misma hora que se produjo el secuestro. Extrañamente a esa hora llegaron los sujetos al domicilio, tocaron la puerta y le dijeron a la niña que ellos le iban a llevar porque supuestamente su padre se les pidió.
Desde esa hora el paradero de la pequeñita era desconocido e incluso sus padres en su afán de desesperación hicieron notas para publicarlas en algunos medios de comunicación. Después de algunas horas cuando ya se había denunciado a la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc), el papá de Eldy recibió una llamada. Los secuestradores, en primera instancia, le pidieron 3.000 dólares. Posteriormente a esa llamada hubo otra al mismo teléfono, pero está vez pedían más de 5.000 dólares. El papá, un abogado que se dedica a la venta de maderas, accedió para salvar a su hija.
Toda esa supuesta negociación que los delincuentes habrían ejecutado con el papá de la niña, posteriormente fue de conocimiento del personal especializado de la Felcc. Los secuestradores dieron el lugar y hora donde iba a entregar el dinero. Horas después cuando se iba a realizar el rescate, extrañamente los secuestradores cambiaron el lugar: zona Tika Loma. Sin embargo, el personal encubierto de la Policía ya había rodeado la zona donde está la agencia de venta de Coca Cola.
El padre de Eldy acudió a la zona y dejó la bolsa de dinero donde le habían indicado los secuestradores, pero a cambio de ello en ese mismo instante la niña fue liberada cerca de su casa. Ese intercambio se produjo a plena luz del día, la pequeña Eldy estuvo secuestrada 21 horas aproximadamente antes de ser liberada.
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