La muerte del quemado compromete a 100 personas
Drama. Ayer sepultaron a Marco Antonio Gómez, que sufrió quemaduras en un 90 por ciento de su cuerpoLa Fiscalía y la Policía tienen una nómina de casi 100 personas que formaban parte de una turba enardecida que en pasados días participó en la disputa por tierras y que al final convirtió en una antorcha humana a Marco Antonio Gómez Carrasco (42), que perdió la vida.
Érika Oroza, abogada de la familia de la víctima, manifestó que son casi 100 las personas que tienen participación en diferentes grados de responsabilidad en la violencia desatada en el predio Texas del kilómetro 17 y medio, entre Santa Cruz y Warnes. La jurista expresó que la comisión de fiscales, integrada por Jorge Fernández, Anuncio Piérola y Juan Ribera Álvarez, intensificó su trabajo y que se librará apremios contra los implicados que figuran entre instigadores, cómplices, encubridores y autores directos del suceso que conmovió a la sociedad. Oroza señaló que el crimen cometido es un acto de barbarie típico del esplendor de la Edad Media como consecuencia de la ausencia total del Estado para proteger el derecho de los ciudadanos.
Mientras tanto, el fiscal Jorge Fernández aseguró que la investigación es amplia y que la situación jurídica de los ocho detenidos en la cárcel de Palmasola y otras personas que aún están prófugas se agrava por la muerte de Marco Antonio Gómez, producto de graves quemaduras.
Fernández expresó que la tipificación jurídica de intento de asesinato cambió a asesinato, según el artículo 252 del Código Penal, que establece 30 años de cárcel. Actualmente están detenidos en la cárcel de Palmasola los loteadores Juan Ticona López, Tania Vargas Vallejos, Luis Fernando Barrios, Agustín Barrios, Eladio Moirenda, Claudio Céspedes Raldes, Ángel Herrera Córdova y Javier Cosme Mollerinoca.
La tarde de ayer fueron enterrados en el cementerio La Cuchilla los restos de Marco Antonio Gómez en medio del dolor de la familia. Emilia Carrasco, madre de la víctima, expresó que este crimen no debe quedar en la impunidad. “Las imágenes de este hecho bárbaro deben quedar grabadas en la sociedad para que no vuelva a repetirse”, dijo la madre.
Detenidos pretenden una coartada
Las ocho personas detenidas en el predio Texas después de haber lanzado una bomba molotov a un cuarto donde se refugió Marco Antonio Gómez plantearon una acción de libertad, pero perdieron ante la justicia. Los imputados argumentan que nunca participaron del suceso, pero que estuvieron en el lugar como curiosos y por simple casualidad.
La versión de los detenidos fue calificada por la Fiscalía como una coartada para salir en libertad. Incluso a través de sus abogados sugirieron que Marco Antonio Gómez provocó el incendio y que fue un autoatentado. Las versiones provocaron reacción en la defensa de la víctima y los fiscales, que consideraron que los imputados sólo pretenden tender una cortina de humo para sacar ventaja.
Según el informe policial y del poder de los detenidos se incautó objetos contundentes y restos de una bomba molotov que fue utilizada para incendiar la habitación donde se refugiaba Gómez.
Érika Oroza, abogada de la familia de la víctima, manifestó que son casi 100 las personas que tienen participación en diferentes grados de responsabilidad en la violencia desatada en el predio Texas del kilómetro 17 y medio, entre Santa Cruz y Warnes. La jurista expresó que la comisión de fiscales, integrada por Jorge Fernández, Anuncio Piérola y Juan Ribera Álvarez, intensificó su trabajo y que se librará apremios contra los implicados que figuran entre instigadores, cómplices, encubridores y autores directos del suceso que conmovió a la sociedad. Oroza señaló que el crimen cometido es un acto de barbarie típico del esplendor de la Edad Media como consecuencia de la ausencia total del Estado para proteger el derecho de los ciudadanos.
Mientras tanto, el fiscal Jorge Fernández aseguró que la investigación es amplia y que la situación jurídica de los ocho detenidos en la cárcel de Palmasola y otras personas que aún están prófugas se agrava por la muerte de Marco Antonio Gómez, producto de graves quemaduras.
Fernández expresó que la tipificación jurídica de intento de asesinato cambió a asesinato, según el artículo 252 del Código Penal, que establece 30 años de cárcel. Actualmente están detenidos en la cárcel de Palmasola los loteadores Juan Ticona López, Tania Vargas Vallejos, Luis Fernando Barrios, Agustín Barrios, Eladio Moirenda, Claudio Céspedes Raldes, Ángel Herrera Córdova y Javier Cosme Mollerinoca.
La tarde de ayer fueron enterrados en el cementerio La Cuchilla los restos de Marco Antonio Gómez en medio del dolor de la familia. Emilia Carrasco, madre de la víctima, expresó que este crimen no debe quedar en la impunidad. “Las imágenes de este hecho bárbaro deben quedar grabadas en la sociedad para que no vuelva a repetirse”, dijo la madre.
Detenidos pretenden una coartada
Las ocho personas detenidas en el predio Texas después de haber lanzado una bomba molotov a un cuarto donde se refugió Marco Antonio Gómez plantearon una acción de libertad, pero perdieron ante la justicia. Los imputados argumentan que nunca participaron del suceso, pero que estuvieron en el lugar como curiosos y por simple casualidad.
La versión de los detenidos fue calificada por la Fiscalía como una coartada para salir en libertad. Incluso a través de sus abogados sugirieron que Marco Antonio Gómez provocó el incendio y que fue un autoatentado. Las versiones provocaron reacción en la defensa de la víctima y los fiscales, que consideraron que los imputados sólo pretenden tender una cortina de humo para sacar ventaja.
Según el informe policial y del poder de los detenidos se incautó objetos contundentes y restos de una bomba molotov que fue utilizada para incendiar la habitación donde se refugiaba Gómez.
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