Tres muertos y seis heridos tras embarrancamiento de un vehículo
En el lugar de los hechos
El muro de contención de cemento quedó destruidoUn fatal accidente registrado ayer cerca a las 19:00 dejó como saldo tres personas muertas y seis heridas, casi todas de una misma familia. El vehículo en el que venían, se embarrancó al menos unos 25 metros y se estrelló contra el techo de las caballerizas del Castillo de la Glorieta. Aparentemente, el conductor perdió el control del vehículo.
Los primeros heridos en llegar al Hospital Santa Bárbara, fueron dos mujeres, una de ellas, una joven de unos 25 a 27 años, que tenía algunas manchas de sangre en la ropa y las manos. Visiblemente afectada y al borde del llanto, ayer, en la puerta misma de Emergencias del Hospital, les pedía a los médicos y policías que la auxiliaron que rescatasen también a su padre. “¡Mi papá, mi papá, por favor!”, exclamaba.
Tras dejar a los dos primeros heridos, otra ambulancia partió a toda velocidad rumbo al lugar del hecho. En el camino, se cruzó con el par de ambulancias que había ido a recoger al resto de los heridos.
Una vez en el lugar, dos de las personas muertas yacían al pie del vehículo en el que se accidentaron, una vagoneta Mitsubushi Montero Sport de color blanco. Una de ellas, un hombre de unos 40 a 50 años de edad, aparentemente conductor del vehículo, que se encontraba tendido al pie del vehículo volcado. Al lado derecho, una mujer, también de unos 40 a 50 años de edad. Son de la familia Arce, excepto algunos, se escuchó decir.
La parte delantera del vehículo tenía los fierros totalmente retorcidos por el potente impacto que sufrió cuando cayó al precipicio y chocó contra el barandal de cemento del techo y el techo mismo de las caballerizas del Castillo de la Glorieta, que, afortunadamente, no colapsó.
TESTIGOS
Algunos testigos del hecho, dijeron a CORREO DEL SUR que, segundos antes de que el vehículo cayera, se escuchó un fuerte freno de neumáticos, seguido de tres fuertes golpes.
A esa hora, casi todo estaba oscuro y sólo se escuchaba los gritos de auxilio de dos personas. La guardia del Liceo Militar –unas 30 personas– fue la que auxilió a los heridos. Lo primero que encontraron, fueron dos mujeres jóvenes sentadas fuera del vehículo y un pequeñín de pie de unos 10 años de edad, muy asustado por lo que había ocurrido.
De los asientos traseros del vehículo, tras romper con dificultad el vidrio de la puerta izquierda, sacaron a tres personas heridas, todas mujeres, según dijeron, una con un golpe en la columna y otra con fractura expuesta.
Las dos personas de los asientos delanteros, los fallecidos, estaban aprisionados por los fierros del vehículo. Les tomaron el pulso, y ya estaban muertos. Para sacarlos, los 30 conscriptos de la guardia del Liceo tuvieron que levantar con mucha dificultad el vehículo.
Una de las muchachas que encontraron sentada a lado del vehículo, según los testigos, dijo que, cuando su vehículo iba a tomar la curva que está justo arriba del Castillo, se encontraron con bastante ripio o arenilla, lo que hizo que el vehículo perdiera estabilidad, y el conductor, el control del vehículo.
No se sabe si el conductor estaba en estado de ebriedad. El fiscal de turno y sus colaboradores le tomaron ayer una muestra de sangre al conductor en el mismo lugar del hecho.
Casi a la media noche de ayer, otras de las personas heridas, una mujer, que había sido ingresada en la Unidad de Terapia Intensiva en el hospital, falleció.
POSIBLES CAUSAS
Según las primeras investigaciones de la Unidad Operativa de Transito, se presume que los ocupantes del vehículo volvían de ver la carrera del Circuito Oscar Crespo.
La arenilla con el que se toparon, la dejaron los coches que participaron de la competencia. Existe también la posibilidad de que otro vehículo haya invadido carril, pero esto aún no fue establecido plenamente.
Los primeros heridos en llegar al Hospital Santa Bárbara, fueron dos mujeres, una de ellas, una joven de unos 25 a 27 años, que tenía algunas manchas de sangre en la ropa y las manos. Visiblemente afectada y al borde del llanto, ayer, en la puerta misma de Emergencias del Hospital, les pedía a los médicos y policías que la auxiliaron que rescatasen también a su padre. “¡Mi papá, mi papá, por favor!”, exclamaba.
Tras dejar a los dos primeros heridos, otra ambulancia partió a toda velocidad rumbo al lugar del hecho. En el camino, se cruzó con el par de ambulancias que había ido a recoger al resto de los heridos.
Una vez en el lugar, dos de las personas muertas yacían al pie del vehículo en el que se accidentaron, una vagoneta Mitsubushi Montero Sport de color blanco. Una de ellas, un hombre de unos 40 a 50 años de edad, aparentemente conductor del vehículo, que se encontraba tendido al pie del vehículo volcado. Al lado derecho, una mujer, también de unos 40 a 50 años de edad. Son de la familia Arce, excepto algunos, se escuchó decir.
La parte delantera del vehículo tenía los fierros totalmente retorcidos por el potente impacto que sufrió cuando cayó al precipicio y chocó contra el barandal de cemento del techo y el techo mismo de las caballerizas del Castillo de la Glorieta, que, afortunadamente, no colapsó.
TESTIGOS
Algunos testigos del hecho, dijeron a CORREO DEL SUR que, segundos antes de que el vehículo cayera, se escuchó un fuerte freno de neumáticos, seguido de tres fuertes golpes.
A esa hora, casi todo estaba oscuro y sólo se escuchaba los gritos de auxilio de dos personas. La guardia del Liceo Militar –unas 30 personas– fue la que auxilió a los heridos. Lo primero que encontraron, fueron dos mujeres jóvenes sentadas fuera del vehículo y un pequeñín de pie de unos 10 años de edad, muy asustado por lo que había ocurrido.
De los asientos traseros del vehículo, tras romper con dificultad el vidrio de la puerta izquierda, sacaron a tres personas heridas, todas mujeres, según dijeron, una con un golpe en la columna y otra con fractura expuesta.
Las dos personas de los asientos delanteros, los fallecidos, estaban aprisionados por los fierros del vehículo. Les tomaron el pulso, y ya estaban muertos. Para sacarlos, los 30 conscriptos de la guardia del Liceo tuvieron que levantar con mucha dificultad el vehículo.
Una de las muchachas que encontraron sentada a lado del vehículo, según los testigos, dijo que, cuando su vehículo iba a tomar la curva que está justo arriba del Castillo, se encontraron con bastante ripio o arenilla, lo que hizo que el vehículo perdiera estabilidad, y el conductor, el control del vehículo.
No se sabe si el conductor estaba en estado de ebriedad. El fiscal de turno y sus colaboradores le tomaron ayer una muestra de sangre al conductor en el mismo lugar del hecho.
Casi a la media noche de ayer, otras de las personas heridas, una mujer, que había sido ingresada en la Unidad de Terapia Intensiva en el hospital, falleció.
POSIBLES CAUSAS
Según las primeras investigaciones de la Unidad Operativa de Transito, se presume que los ocupantes del vehículo volvían de ver la carrera del Circuito Oscar Crespo.
La arenilla con el que se toparon, la dejaron los coches que participaron de la competencia. Existe también la posibilidad de que otro vehículo haya invadido carril, pero esto aún no fue establecido plenamente.
No hay comentarios