Envían tras las rejas a 5 implicados en asesinato
Miembros de la familia acusada del crimen, ayer Cinco integrantes del denominado clan Lafuente García, señalado como sospechoso del triple asesinato de la familia Cuba Ríos, fueron enviados ayer a prisión por el juez de Vinto, Wilfor Garvizu, que resolvió ponerlos tras las rejas en una inédita audiencia celebrada en el comando de la Policía de Quillacollo y en la que se impusieron restricciones al margen de legalidad con el argumento de que el juzgador temía por su vida y para evitar que los vecinos que instalaron una vigilia afuera del recinto policial atenten contra los detenidos. A las pocas horas de dictarse las cinco detenciones, la Policía detuvo a dos prófugos del clan: Wilson Lafuente García y Jhonny Lafuente, considerados autores intelectuales y materiales del crimen según testigos y pobladores del lugar que los vieron por el terreno el 19 de junio.
Sheila Toledo, de nacionalidad peruana y nuera de los principales sospechosos, se echó a llorar tras escuchar la orden para que sea detenida en San Pablo de Quillacollo junto con una de las nietas del clan reconocida como Fabiola Rojas Lafuente y el padre de los sospechosos, Félix Lafuente, que habría participado como enlace para ganarse la confianza de las víctimas: Rosalía Ríos y Cornelio Cuba, muertos a tiros el 19 de junio junto a su nieta Soraya.
Edwin Lafuente, hijo del clan y ex convicto de la cárcel de San Pablo de Quillacollo por robo agravado en 2006, abandonó la audiencia escondiendo su rostro y fue conducido al penal de San Antonio. Mientras que su cuñado, José Torrejón, no pudo contener el llanto al enterarse de su detención en San Sebastián.
Con los últimos detenidos, son seis los sospechosos que están presos por el triple asesinato de la familia Cuba Ríos, considerado uno de los peores en la historia criminal del Valle Bajo. Teodolinda García (73), madre de los principales sospechosos y abuela de una de las detenidas, fue la primera en ser aprehendida a fines de junio debido a que las víctimas fueron vistas por última vez el 19 de ese mes en el mercado Santa Bárbara con ella dirigiéndose a comprar un terreno a Vinto, donde fueron encontradas sin vida.
Ella y los demás detenidos están implicados en el robo de los 35 mil dólares de la pareja Cuba Ríos que derivó en el triple crimen.
Sin embargo, la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen encontró en su poder papeles con dibujos de la casa y el camión, además de testimonios de vecinos que aseguraron haber visto a los sospechosos merodeando por Vinto el día de los hechos. El abogado de las víctimas, Eduardo Mérida, informó que en el juicio oral pedirá la pena máxima de 30 años.
Temores y opiniones
Eduardo Mérida, abogado
“Es evidente que hay amenazas. No sólo tenían escrito mi nombre en un papel como el abogado de Noelia (un anterior caso que atendía), sino también de Rosemary, la hija de las víctimas recién llegada de España, además de un dibujo de la movilidad y de la casa.
Rosemary Cuba, hija de víctimas
“A mi hermano menor lo vinieron a buscar el día del velorio. El robo y crimen desde mi punto de vista es que estas personas son enviadas. Es una coartada: los han estudiado a mis padres y sabían que manejaban dinero. Es alguien cercano tal vez a nosotros.
Freddy Patzi, dirigente Caramarca
“En el sector de Caramarca estamos movilizados. Somos unos 18 mil habitantes. En todo el municipio estamos en estado de emergencia por la inseguridad y la muerte de los tres vecinos. Nos duele la muerte de los tres, sobre todo de la angelita (Soraya)”.
Juan Ormachea, dirigente Sipe Sipe
“He participado en la audiencia y detenidamente he escuchado como dirigente cómo ha ocurrido. La Fiscalía ha expuesto y la defensa ha querido probar la inocencia. Pero ha sido muy claro: el juez ha dictaminado que tiene que detenerse las cinco personas como probables asesinos”.
Sheila Toledo, de nacionalidad peruana y nuera de los principales sospechosos, se echó a llorar tras escuchar la orden para que sea detenida en San Pablo de Quillacollo junto con una de las nietas del clan reconocida como Fabiola Rojas Lafuente y el padre de los sospechosos, Félix Lafuente, que habría participado como enlace para ganarse la confianza de las víctimas: Rosalía Ríos y Cornelio Cuba, muertos a tiros el 19 de junio junto a su nieta Soraya.
Edwin Lafuente, hijo del clan y ex convicto de la cárcel de San Pablo de Quillacollo por robo agravado en 2006, abandonó la audiencia escondiendo su rostro y fue conducido al penal de San Antonio. Mientras que su cuñado, José Torrejón, no pudo contener el llanto al enterarse de su detención en San Sebastián.
Con los últimos detenidos, son seis los sospechosos que están presos por el triple asesinato de la familia Cuba Ríos, considerado uno de los peores en la historia criminal del Valle Bajo. Teodolinda García (73), madre de los principales sospechosos y abuela de una de las detenidas, fue la primera en ser aprehendida a fines de junio debido a que las víctimas fueron vistas por última vez el 19 de ese mes en el mercado Santa Bárbara con ella dirigiéndose a comprar un terreno a Vinto, donde fueron encontradas sin vida.
Ella y los demás detenidos están implicados en el robo de los 35 mil dólares de la pareja Cuba Ríos que derivó en el triple crimen.
Sin embargo, la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen encontró en su poder papeles con dibujos de la casa y el camión, además de testimonios de vecinos que aseguraron haber visto a los sospechosos merodeando por Vinto el día de los hechos. El abogado de las víctimas, Eduardo Mérida, informó que en el juicio oral pedirá la pena máxima de 30 años.
Temores y opiniones
Eduardo Mérida, abogado
“Es evidente que hay amenazas. No sólo tenían escrito mi nombre en un papel como el abogado de Noelia (un anterior caso que atendía), sino también de Rosemary, la hija de las víctimas recién llegada de España, además de un dibujo de la movilidad y de la casa.
Rosemary Cuba, hija de víctimas
“A mi hermano menor lo vinieron a buscar el día del velorio. El robo y crimen desde mi punto de vista es que estas personas son enviadas. Es una coartada: los han estudiado a mis padres y sabían que manejaban dinero. Es alguien cercano tal vez a nosotros.
Freddy Patzi, dirigente Caramarca
“En el sector de Caramarca estamos movilizados. Somos unos 18 mil habitantes. En todo el municipio estamos en estado de emergencia por la inseguridad y la muerte de los tres vecinos. Nos duele la muerte de los tres, sobre todo de la angelita (Soraya)”.
Juan Ormachea, dirigente Sipe Sipe
“He participado en la audiencia y detenidamente he escuchado como dirigente cómo ha ocurrido. La Fiscalía ha expuesto y la defensa ha querido probar la inocencia. Pero ha sido muy claro: el juez ha dictaminado que tiene que detenerse las cinco personas como probables asesinos”.
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