Mató a su pareja de dos puñaladas
Una mujer enfurecida asestó dos puñaladas mortales a su concubino, en medio de una riña ocurrida en su vivienda del barrio Simón Bolívar en la localidad de La Guardia.
Marcelo Rojas, de 27 años, falleció camino al centro médico San Silvestre, a causa de la herida de cuchillo en el pecho y otra en la espalda ocasionada por su cónyuge, Delicia López Camargo, de 28 años que quedó arrestada en la celda policial de esa localidad.
La pelea ocurrió a las 6.30 de ayer cuando ambos bebieron hasta el amanecer en su habitación. “Siempre discutían por todo y nada. No se llevaban bien como pareja”, contó la hermana de la homicida, Kendy López.
Según la mujer, escuchó gritos en la habitación de su hermana y luego vio salir a Marcelo ensangrentado pidiendo auxilio hasta la puerta de su cuarto, donde cayó desvanecido.
“Entré al cuarto de mi hermana al saber lo que había pasado y me dijo de lo más tranquila que lo apuñaló porque mucho la molestaba y que la deje en paz porque se iba a marchar”, relató la cuñada.
El hombre tuvo que ser auxiliado y conducido hasta un centro médico encima de una carretilla, pero debido a la hemorragia que le produjo las heridas murió a medio camino por anemia aguda.
La homicida quedó arrestada minutos después del hecho y conducida hasta celdas de la Policía de La Guardia. Ambos se habían concubinado hace tres años y la víctima trabajaba de granjero y su pareja de ama de casa.
Marcelo Rojas, de 27 años, falleció camino al centro médico San Silvestre, a causa de la herida de cuchillo en el pecho y otra en la espalda ocasionada por su cónyuge, Delicia López Camargo, de 28 años que quedó arrestada en la celda policial de esa localidad.
La pelea ocurrió a las 6.30 de ayer cuando ambos bebieron hasta el amanecer en su habitación. “Siempre discutían por todo y nada. No se llevaban bien como pareja”, contó la hermana de la homicida, Kendy López.
Según la mujer, escuchó gritos en la habitación de su hermana y luego vio salir a Marcelo ensangrentado pidiendo auxilio hasta la puerta de su cuarto, donde cayó desvanecido.
“Entré al cuarto de mi hermana al saber lo que había pasado y me dijo de lo más tranquila que lo apuñaló porque mucho la molestaba y que la deje en paz porque se iba a marchar”, relató la cuñada.
El hombre tuvo que ser auxiliado y conducido hasta un centro médico encima de una carretilla, pero debido a la hemorragia que le produjo las heridas murió a medio camino por anemia aguda.
La homicida quedó arrestada minutos después del hecho y conducida hasta celdas de la Policía de La Guardia. Ambos se habían concubinado hace tres años y la víctima trabajaba de granjero y su pareja de ama de casa.
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