Un niño violado murió a raíz de una infección
La tarde del domingo, en el hospital Japonés, murió el niño Daniel Q.T. (13) de una infección generalizada como consecuencia de una presunta violación ocurrida hace dos semanas en la comunidad Eiti, cantón de la Quinta Sección de la provincia Cordillera, según fuentes extraoficiales.
De acuerdo con los datos, a raíz del ultraje sexual en el que aparentemente le introdujeron algún objeto sólido, el muchacho sufrió una perforación en los intestinos, que le ocasionó una contaminación en la cavidad estomacal que a la postre le costó la vida. La víctima fue trasladada de su tierra natal al hospital Japonés, donde permaneció en estado grave durante una semana y falleció.
El médico forense Hugo Cuéllar practicó la autopsia al cadáver y certificó que la causa de la muerte fue una septicemia. Asimismo, comentó con su personal que hubo violación, pero dicho extremo será corroborado aproximadamente en una semana, cuando salgan los resultados de los análisis de las muestras de tejidos y fluidos sacados al cuerpo ayer, según dijo Daniel Silva, administrador de la morgue.
La madre del infortunado pequeño y un concejal del municipio de Gutiérrez estuvieron ayer en el depósito de cadáveres y confirmaron a las autoridades del Ministerio Público el abuso sexual al que fue sometido el chico por uno o dos individuos, pero se mostraron esquivos con los medios de comunicación, debido a que querían evitar que el caso se divulgue antes de la captura de los autores del execrable hecho.
La Policía de Camiri, capital de la provincia Cordillera, no ha registrado la denuncia sobre el referido delito, según su comandante Ramiro Vega. El caso está en manos del fiscal Óscar Flores, de la división Homicidios de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) de la ciudad capital, que tenía planificado conformar una comisión para viajar anoche a Eiti con el fin de aprehender al o los autores del delito, cuya pena de privación de libertad es de 30 años, pues el abuso le provocó la muerte.
Entre tanto, se supo que el representante del Concejo municipal de Gutiérrez pagó el traslado de los restos de Daniel a su pueblo natal para darle cristiana sepultura.
De acuerdo con los datos, a raíz del ultraje sexual en el que aparentemente le introdujeron algún objeto sólido, el muchacho sufrió una perforación en los intestinos, que le ocasionó una contaminación en la cavidad estomacal que a la postre le costó la vida. La víctima fue trasladada de su tierra natal al hospital Japonés, donde permaneció en estado grave durante una semana y falleció.
El médico forense Hugo Cuéllar practicó la autopsia al cadáver y certificó que la causa de la muerte fue una septicemia. Asimismo, comentó con su personal que hubo violación, pero dicho extremo será corroborado aproximadamente en una semana, cuando salgan los resultados de los análisis de las muestras de tejidos y fluidos sacados al cuerpo ayer, según dijo Daniel Silva, administrador de la morgue.
La madre del infortunado pequeño y un concejal del municipio de Gutiérrez estuvieron ayer en el depósito de cadáveres y confirmaron a las autoridades del Ministerio Público el abuso sexual al que fue sometido el chico por uno o dos individuos, pero se mostraron esquivos con los medios de comunicación, debido a que querían evitar que el caso se divulgue antes de la captura de los autores del execrable hecho.
La Policía de Camiri, capital de la provincia Cordillera, no ha registrado la denuncia sobre el referido delito, según su comandante Ramiro Vega. El caso está en manos del fiscal Óscar Flores, de la división Homicidios de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) de la ciudad capital, que tenía planificado conformar una comisión para viajar anoche a Eiti con el fin de aprehender al o los autores del delito, cuya pena de privación de libertad es de 30 años, pues el abuso le provocó la muerte.
Entre tanto, se supo que el representante del Concejo municipal de Gutiérrez pagó el traslado de los restos de Daniel a su pueblo natal para darle cristiana sepultura.
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